La zona conocida como Torcal Alto encierra las formaciones kársticas más espectaculares del paraje. Las rocas presentan aquí formas tan sorprendentes que han cobrado protagonismo por sí mismas: El Sombrerillo, El Cáliz, El Dado, El Adelantado o El Tornillo, este último declarado Monumento Natural por su original aspecto, que le ha valido convertirse en todo un símbolo de lo que ofrece y significa esta misteriosa ciudad de piedra.
Es también en el Torcal Alto donde se encuentran dos senderos señalizados de libre acceso, la Ruta Verde (dificultad media-baja) y la Ruta Amarilla (dificultad media). Ambas parten del área de estacionamiento, en las inmediaciones del Centro de Visitantes, y atraviesan multitud de pasadizos entre increíbles formaciones rocosas que hacen volar la imaginación de quienes se animan a recorrerlas.
En el entorno de estos dos itinerarios, el visitante puede disfrutar además de las panorámicas que se contemplan desde algunos miradores como el de Las Ventanillas, en el que se alcanza a ver el continente africano en los días despejados.